La producción de ropa a nivel masivo se olvida muchas veces de que hay ciudadanos, con un estilo determinado, a los que les cuesta abrochar el botón de un pantalón o ponerse un abrigo. Para concienciar a nivel global de lo importante que es la moda inclusiva y que el diseño universal siga creciendo, las marcas tienen que cambiar su forma de confeccionar la ropa.
Por eso, los discapacitados necesitan que las tiendas tengan los elementos necesarios para poder probarse la ropa de manera cómoda.
Aquí hay varias opciones para ello:
Colocar las estanterías a baja o media altura. Es muy complicado incluso para la gente bajita acceder a ciertos estantes que llegan prácticamente hasta el techo. Para empezar a vender lo primero es tener el producto colocado en una posición que el cliente pueda alcanzar con facilidad.
Evitar caer en la apetitosa opción para los establecimientos reducidos de utilizar los amplios probadores para personas con movilidad reducida a modo de almacén. Este hueco debe quedar siempre libre y disponible para que así aquel que lo necesite disponga del espacio requerido.
Hay que eliminar los peldaños que dificultan el acceso a los locales. En su lugar, si tenemos espacio para habilitar una rampa, ayudaremos a que deslicen mejor las sillas de ruedas.
¿Qué es lo que define la moda inclusiva?
Cuando una publicidad de ropa integra a maniquíes de diferente talla, lo que está haciendo es representar la moda inclusiva, porque el amplio espectro de la sociedad puede sentirse identificado con su anuncio. Algunas propuestas que pueden ayudar a sensibilizar a la población de nuestra gran diversidad serían las siguientes:
Renunciar al retoque de cicatrices en las fotos publicitarias. No vendamos un cuerpo “perfecto” al que se asemejan los anuncios de la propia competencia. Expongamos uno real y único, acentuando las virtudes que lo hacen especial.
A día de hoy se ha avanzado bastante en temas como la discriminación racial. Nos cuesta pensar en marcas que no incluyan a modelos con distinto color de piel. Asos es un buen ejemplo de empresa de moda que ha dejado de utilizar Photoshop para cubrir las estrías de las chicas. Sin embargo falta todavía un largo camino hasta que veamos en el mismo sitio a modelos discapacitadas.
Desfiles con modelos profesionales que sufran algún tipo de discapacidad. En relación con lo comentado, queremos que se dé mayor visibilidad a este colectivo de la sociedad, porque están absolutamente capacitados para realizar trabajos relacionados con el mundo de la estética. En Madrid se celebró una jornada en el centro comercial Islazul. Bajo el lema #ModaParaTodos se organizó una pasarela muy diversa.
Consigamos que ir de compras no sea una tortura para quienes se movilizan en silla de ruedas o para las personas invidentes.
Marina Mateo Medrano
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